Mucha apología a Sarmiento,
pero es contradictorio con el trasfondo que emite el trabajo, donde es una apología
a lo federal, al caudillismo, también es contradictorio porque nadie más misógeno
y misántropo que este personaje, ah, me olvide de etiquetarlo de masónico también.
Muchas migradas, de
distintas provincias, es muy federal la compilación, hecho que debería de ser
esperable.
Mucha aparición de la
palabra melancolía, no me parece que es en busca de ser poética, me parece que
se quebrantan del humor negro.
Hay cartas de Mariquita Sanchez,
inspectora de dementes, yo estaba escribiendo una minibiografia de ella, uno de
sus esposos militar muere de fuerte delirio.
Juana Gorriti, amante de
Sarmiento, o la hija parece ser, inspectora de dementes también, esto lo
trabaje en “un acercamiento a la Residencia y la Convalescencia en la época de
Rosas”.
El resto, lo esperable,
y ya trillado trabajado por el grueso de feminismo posterior.
Mi humilde opinión personal,
acá no se tiene en cuenta los escritos de mujeres anteriores, básicamente epistolares,
por ejemplo, el epistolario de las monjas de la caridad, del huerto y de asilo
de pastor, o mujeres asesoradas por jesuitas, por ejemplo, Antonia Paz y de Figueroa,
porque para algunas ser mujer y ser religiosa es una contradicción, mi óptica es
hegeliana a ese nivel, están a un nivel superador y nivelador, donde esa contradicción
ya no existe.
Confirmo desde acá, aceptación
de trabajo del Congreso Internacional, no me he fijado si lo publicaron, cuando
tenga nuevas agallas me fijo, no me mandaron mail confirmador los del congreso.
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