Luego me enteré que en realidad es de Oscar Wilde, ¿por qué habrá sido que
mutilaron el nombre del autor? Ajaja, en realidad el nombre está puesto en la
página final del cuento, pero no recordé nunca asociarlo con este autor.
De Editorial Sudamericana, con ilustraciones de Horacio Elena, publicado
en mayo de 1985, es el número 17.
Un lector venezolano me habló de este cuentito, en realidad es un cuentazo,
de Oscar Wilde, que lloró con él, sentida emoción la mía, la fotografié y acá
está.
En realidad, cuando veo un monumento todo oxidado, y como olvidado, y con única
compañía pájaros de distintas especies, en el medio del frio, recuerdo este
cuentito.
Un detalle simpático de Horacio Elena, el ilustrador, es del escritor
pobre, con única compañía de un ratón con bufanda, miren la ilustración, y verán
que simpático es.